El cáncer de útero

¿QUÉ ES EL CÁNCER DE ÚTERO?

Cuando el cáncer comienza en el útero se llama cáncer de útero. El útero es un órgano en forma de pera ubicado en la pelvis de la mujer. También denominado matriz, el útero es el lugar en el que se desarrolla el bebé cuando la mujer está embarazada.

Hay dos tipos principales de cáncer de útero:
Cáncer de endometrio: Es el tipo de cáncer de útero más común. El cáncer de endometrio se forma en el revestimiento del útero, llamado endometrio.
Sarcoma uterino: Es un tipo raro de cáncer de útero que se forma en el músculo u otro tejido del útero.
Si el cáncer de útero se detecta en sus etapas iniciales, el tratamiento es más eficaz.

Preguntas Frecuentes

¿Quién puede contraer cáncer de útero?

Todas las mujeres, salvo aquellas a las que se les ha extirpado el útero mediante una histerectomía, tienen riesgo de contraer cáncer de útero y este riesgo aumenta con la edad.
La mayoría de los casos de cáncer de útero se diagnostican en mujeres durante o después de la menopausia.

¿Cuáles son los signos y los síntomas del cáncer de útero?

Los signos y los síntomas del cáncer de útero incluyen:
• Flujo vaginal o sangrado que no es normal para usted. El sangrado puede ser anormal debido a que es muy abundante o debido al momento en que ocurre, como por ejemplo sangrar después de ya haber pasado la menopausia; sangrado entre períodos menstruales; o cualquier otro sangrado que sea más prolongado o abundante de lo normal para usted.
• Dolor o presión en la pelvis. Si tiene un sangrado que no es normal para usted, especialmente si sangra después de ya haber pasado la menopausia, visite a un médico inmediatamente. Si siente dolor o presión en la pelvis o tiene flujo vaginal anormal que dura dos o más semanas, visite a un médico. Estos síntomas podrían ser causados por algo diferente al cáncer, pero la única manera de saberlo es visitando a un médico

¿Qué aumenta la probabilidad de una mujer de contraer cáncer de útero?

No hay manera de saber si usted contraerá cáncer de útero. Sin embargo, hay varios factores que pueden aumentar su riesgo de contraer cáncer de útero como:
• Tener más de 50 años de edad.
• Ser obesa (tener una cantidad excepcionalmente alta y perjudicial de grasa corporal).
• Toma estrógeno solo para el reemplazo hormonal durante la menopausia. En general, cuando se use estrógeno se debe hacer en combinación con la otra hormona femenina, la progesterona.
• Haber tenido problemas para quedar embarazada o haber tenido menos de cinco períodos menstruales en un año cualquiera durante toda su vida antes de comenzar la menopausia.
• Tomar tamoxifeno, un medicamento usado para prevenir o tratar ciertos tipos de cáncer de seno (mama). Que usted tenga uno o más de estos factores no significa que tendrá cáncer de útero pero debería hablar con su médico para saber si le recomienda hacerse exámenes más seguidos.
Las mujeres que tienen una forma heredada de cáncer colorrectal, llamado síndrome de cáncer colorrectal hereditario no poliposo, corren mayor riesgo de contraer cáncer de útero. Eso puede aplicarse si tiene parientes cercanos de sexo femenino (es decir, su madre, abuela, hermana, tía o hija) que hayan tenido cáncer de útero u ovario. Si es así, hable con su médico para preguntarle si debe hacerse exámenes anuales y biopsias del endometrio a partir de los 35 años de edad

¿Qué puedo hacer para prevenir o disminuir mi probabilidad de contraer cáncer de útero?

No se conoce una manera de prevenir el cáncer de útero. Sin embargo, las siguientes cosas han demostrado reducir la probabilidad de contraer cáncer de útero:
• Tomar píldoras anticonceptivas.
• Tener un peso saludable y ser activa físicamente.
• Tomar progesterona, si está tomando estrógeno.
• Hablar con un médico sobre la frecuencia con la que debe hacerse exámenes para detectar cáncer de útero, en especial si piensa que tiene factores que aumentan su probabilidad de contraerlo

¿Hay formas de detectar el cáncer de útero en etapas tempranas?

No existe una manera simple y confiable de detectar el cáncer de útero en mujeres que no presentan signos o síntomas. La prueba de Papanicolaou no detecta el cáncer de útero. El único cáncer que el Papanicolaou puede detectar es el cáncer de cuello uterino. Por esta razón es importante que conozca los signos del cáncer de útero y visite a un médico si presenta alguno de ellos.
Si tiene síntomas o corre mayor riesgo de contraer cáncer de útero, su médico podría hacerle una biopsia del endometrio o un ultrasonido transvaginal. Estos exámenes pueden servir para diagnosticar o descartar el cáncer de útero. El médico podría realizar este examen en su oficina o remitirla a otro médico.
Si la biopsia endometrial no ofrece suficiente información o si los síntomas continúan, el médico podría hacer más exámenes

Diagnostico

¿Cómo se diagnostica el cáncer de útero?

El primer síntoma suele ser un sangrado vaginal anómalo.
• Tras la menopausia, sangrado en cualquier momento.
• Antes de la menopausia, sangrado entre periodos o después de mantener relaciones sexuales.
Otros síntomas pueden incluir:
• Secreción vaginal
• Dolor durante o después de la relación sexual
• Dolor en la parte inferior del abdomen
El sangrado vaginal anómalo puede ser asimismo síntoma de muchas otras afecciones no cancerosas que afectan al útero (por ejemplo, fibromas), por lo que se necesitan pruebas para confirmar un diagnóstico de cáncer uterino.
Estas pruebas incluyen:
• Examen pélvico bimanual: examen vaginal para examinar el útero, la vagina, los ovarios y la vejiga.
• Muestra citológica (citología cervical) para examinar las células de cérvix.
• Ecografía vaginal
• Histeroscopia: el médico extrae tejido del interior de la matriz usando un histeroscopio, un tubo estrecho con un telescopio en su extremo.
• Biopsia o legrado endometrial: el médico extrae tejido del interior de la matriz para examinarlo al microscopio

Prevención

¿Cómo se puede prevenir el cáncer de útero?

Las causas del cáncer uterino no están claras, pero los factores que aumentan el riesgo en una mujer son:
• Edad avanzada: la mayoría de los casos se diagnostican después de la menopausia.
• Exposición a un exceso de estrógeno, por ejemplo a causa de un inicio temprano del periodo o de una menopausia tardía.
• Obesidad, probablemente debida a la producción de estrógenos en los tejidos adiposos.
• Diabetes, posiblemente porque implica resistencia a los efectos de la insulina, que puede estimular el crecimiento de las células cancerosas y, a menudo, se asocia con la obesidad.
• Estrógeno, solo como terapia de reemplazo durante la menopausia.
• Una madre o hermana con cáncer endometrial.
• El síndrome de Lynch, también conocido como cáncer de colon hereditario sin poliposis (HNPCC, por sus siglas en inglés), una afección hereditaria que aumenta el riesgo de cáncer de útero y de colon a una edad más temprana.
• Tratamiento a largo plazo con tamoxifeno, un medicamento administrado para prevenir la recurrencia de cáncer de mama, pero solo cuando lo usan mujeres post menopáusicas.
• No tener hijos.
Las tasas más altas de cáncer uterino en el mundo; más de uno de cada 20 cánceres de mujeres afecta al endometrio, y el número de casos está aumentando. Las tasas crecientes de obesidad son un factor contribuyente importante.
Actualmente no hay pruebas de detección, pero el cáncer uterino puede tratarse con éxito si se diagnostica en una etapa temprana. Aunque la mayoría de las mujeres con sangrado vaginal anormal no tienen cáncer uterino, es vital que cada mujer consulte a su médico lo antes posible si experimenta este síntoma, especialmente después de la menopausia. Las mujeres que tengan un alto riesgo de cáncer de útero debido a su historial familiar deben realizarse exámenes ginecológicos periódicos.

Se cree que algunos factores pueden reducir el riesgo de una mujer a padecer cáncer uterino: 
• Mantener un peso saludable para evitar la obesidad, comenzando en una etapa adulta temprana.
• Estar físicamente activa.
• Tomar café, principalmente con cafeína, pero también descafeinado.
• Tener hijos.
• La mayoría de las píldoras anticonceptivas modernas (píldoras combinadas que contienen estrógeno y progesterona o 'mini píldoras' solo de progesterona) si se toman por tiempo prolongado.
• Terapia de reemplazo hormonal combinada continua (TRH) con estrógeno y progestágeno diarios. Tenga en cuenta que la TRH combinada con estrógeno y progestágeno al mismo tiempo aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama si se toma por tiempo prolongado

Tratamientos

¿Cómo se trata el cáncer uterino?

El pronóstico es relativamente bueno para las mujeres diagnosticadas con cáncer uterino.
En promedio, casi el 80% de ellas sobrevive cinco años después de su diagnóstico cuando el tumor está localizado en el útero. La supervivencia es menor cuando el tumor, en el momento del diagnóstico, ya se ha diseminado al cuello uterino, los ovarios o la cavidad abdominal.
El tratamiento estándar del cáncer uterino es la cirugía. Cuando hay características del tumor que están asociadas con una tendencia al crecimiento, puede ser necesario agregar radioterapia pélvica, quimioterapia y/o terapia hormonal. La terapia conservadora con hormonas se puede considerar en mujeres jóvenes con cáncer uterino temprano que deseen preservar su fertilidad; estos casos deben ser discutidos y tratados solo en centros especializados

Cirugía

Se recomienda para todas las mujeres con cáncer uterino que estén lo suficientemente en forma para la operación. El tipo de cirugía depende del cáncer de la mujer, pero a la mayoría de las mujeres se les recomienda que se les extraigan la matriz, las trompas de Falopio y los ovarios.
En ocasiones, los ganglios linfáticos se extirpan al mismo tiempo para verificar si se necesita tratamiento adicional en caso de que contengan células tumorales.

Radioterapia

Se administra como el tratamiento principal para las mujeres menos aptas o cuando la cirugía no puede extirpar todo el cáncer. También se administra después de la operación para reducir el riesgo de que el cáncer recurra. La radioterapia se puede administrar de dos maneras: o bien externamente a toda la pelvis, o bien internamente a través de un tubo central estrecho de tejido (braquiterapia). Estas formas de radioterapia también se pueden administrar de manera consecutiva, si está indicado. Dado que la radioterapia puede causar efectos secundarios a largo plazo, se están realizando investigaciones para investigar el mejor momento para administrar este tratamiento e identificar a las mujeres que tienen más probabilidades de beneficiarse de él.

Quimioterapia

Se usa cada vez más en mujeres que presentan cáncer uterino avanzado, y las y las combinaciones de medicamentos basadas en platino pueden producir mejoras notables. Los efectos secundarios de la quimioterapia significa que debe adaptarse a la condición de la mujer, especialmente en caso de problemas de salud graves.

Terapia Hormonal

Con progesterona solo se usa en mujeres con una enfermedad menos agresiva, o cuando se observan receptores hormonales en las células cancerosas al examinarlas al microscopio.

Cáncer ginecológico

Los principales tipos de cáncer ginecológico

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